Luis Fernando, 39 días internado en la Clínica Vidacoop y Cafesalud no responde
Permanece inmóvil en una habitación, y según la clínica, la EPS no autoriza procedimientos y el pago por el SOAT ya se agotó.
El 6 de junio pasado Luis Fernando Escorcia, un empleado de un concesionario de autos en el norte de Barranquilla fue arrollado por un taxi cuando se desplazaba por la calle 50 con la carrera 31.
Ese fue su último día de trabajo y sus familiares advierten hoy, al verlo sin movilidad en sus piernas, que ni la EPS en la que está afiliado (Cafesalud), ni la Clínica donde está internado desde ese día (Vidacoop) han hecho el mayor esfuerzo para que “retome su vida normal”. Por el contrario, “se está deteriorando su calidad de vida progresivamente”, asegura Yarelys Martínez, su cuñada.
Luis Fernando y toda su familia, viven en el corregimiento de Palermo, jurisdicción de Sitionuevo, en el departamento del Magdalena, y la moto es su medio de transporte. Ese fatídico 6 de junio un taxi lo arrolló tras volarse la señal de pare. De inmediato, fue conducido a la Clínica Vidacoop. A los dos días fue operado de columna y “hasta ahí llegó el Soat”, aseguró la cuñada a Zona Cero. Tras el accidente, el conductor del taxi se dio a la fuga.
Comenta que desde ese 8 de junio, Luis Fernando Escorcia, sigue en la clínica mientras Cafesalud y Vidacoop “se tiran la pelotica”. Además estuvo 8 días en UCI.
“Vamos a la EPS y nos dicen que la Clínica no les entrega un informe sobre qué procedimiento necesita Luis Fernando. Vamos a Vidacoop y nos responden que Cafesalud no les aprueba la remisión ni ningún tipo de procedimientos”, comentó Yarelys en medio de la incertidumbre que produce en la familia el estado en que se encuentra Luis Fernando. Otro argumento de la Clínica es que Cafesalud “no paga”.
La familia pide que sea trasladado a otro centro asistencial o que la EPS se apersone del caso pues el joven parece abandonado a su suerte “y no le hacen nada en la clínica”. “Por el contrario ya tiene escaras y ahora Vidacoop quiere que le firmemos una salida voluntaria cuando sabemos que requiere atención especializada y no es un caso de atención domiciliaria”.
Así, sin nadie que responda hoy, Luis Fernando Escorcia ha pasado 39 días en la Clínica Vidacoop. Está consciente pero impotente pasa las horas en una habitación sin saber qué pasará y sin entender cómo terminó siendo víctima del taxista que lo arrolló y ahora víctima del sistema de salud.